
Recientemente se desenterró una momia alienígena en una pirámide y los científicos no pueden explicar su origen
El 21 de marzo de 2016, el sitio web Worldwide Science Stories publicó un artículo que afirmaba la confirmación del descubrimiento de una «momia alienígena» en una pirámide egipcia por arqueólogos que permanecían en el anonimato. La criatura, de entre 150 y 160 centímetros de altura, fue encontrada cerca de Lahun mientras se investigaba una pequeña pirámide relacionada con la dinastía doceaba de Senusret II. Según una fuente anónima del Departamento de Antigüedades egipcias, la momia tenía más de 2,000 años.

El descubrimiento de los restos alienígenas generó controversia en todo el mundo. Algunas fuentes en línea especularon que la criatura podría ser un reptil debido a sus rasgos, como sus ojos ovalados excesivamente grandes. Las inscripciones en la tumba de la momia sugirieron que había sido un consejero del rey llamado Osirunet, que significa «estrella» o «enviado del cielo». Sin embargo, la afirmación se veía obstaculizada por la falta de transparencia, ya que la fuente y el «Departamento de Antigüedades de Egipto» operaban en el anonimato.
La credibilidad de la historia se desmoronó cuando se descubrió que la fotografía de la «momia alienígena» se originó en 2008 y representaba un espécimen supuestamente descubierto en Perú, no en Egipto. La imagen original circuló en sitios web internacionales entre 2008 y 2011 antes de que se alterara significativamente para darle un aspecto más «extraterrestre». La falta de imágenes auténticas y la antigüedad de las originales dificultaron la verificación.

Además, se descubrió que el Centro de Ciencias de Saint Louis (SLSC) tenía la momia en su posesión desde 1985. La momia, originalmente adquirida por un dentista a principios del siglo XX durante un viaje a Oriente Medio, era en realidad un niño pequeño parcialmente desenrollado y colocado en una caja de pino. Los investigadores, financiados por el SLSC, llevaron a cabo estudios exhaustivos sobre la momia infantil, y los resultados de la datación por radiocarbono indicaron que vivió entre el 40 a.C. y el 130 d.C., durante la transición del control macedonio-egipcio al dominio romano bajo César Augusto.
En resumen, la afirmación sobre el descubrimiento de una «momia alienígena» en una pirámide egipcia resultó ser una historia falsa, respaldada por evidencia engañosa y fuentes anónimas. La fotografía de la momia se originó en Perú y fue manipulada para crear una apariencia más extraterrestre. En realidad, la momia era un niño antiguo que había sido adquirido por un dentista y donado al Centro de Ciencias de Saint Louis, donde fue objeto de estudios científicos para comprender mejor su historia.
