
Investigadores reconstruyen el estilo de vida y el rostro de un adolescente anglosajón del siglo VII
Una artista forense ha creado una reconstrucción facial de una joven de 16 años que fue enterrada en una cama hace 1,300 años en Inglaterra. Los restos de la adolescente fueron descubiertos en 2011 en lo que se conoce como el entierro de Trumpington Cross, y estaba acompañada de una ornamentada cruz de oro incrustada de rubíes. A través de una sofisticada reconstrucción facial, el artista forense escocés Hew Morrison utilizó datos del cráneo y estudios sobre la profundidad de los tejidos de mujeres caucásicas. La reconstrucción revela una característica facial única: la cuenca del ojo izquierdo estaba ligeramente más baja que la del ojo derecho.

Un análisis isotópico de los huesos y dientes de la adolescente mostró que se mudó a Inglaterra desde los Alpes alemanes cuando tenía aproximadamente 7 años. Además, se encontró que la proporción de proteínas en su dieta disminuyó significativamente cuando llegó a Inglaterra, lo que indica que su salud debió haberse visto afectada por la mudanza y el cambio en su alimentación. Se especula que pudo haber sido parte de un grupo de élite que emigró desde Europa continental en el siglo VII, pero aún hay misterios sin resolver sobre este grupo.

Este entierro es uno de 72 entierros en camas medievales similares encontrados en toda Europa, de los cuales 18 se encuentran en Inglaterra. Todos estos entierros contenían restos femeninos, lo que sugiere que este rito funerario fue en su mayoría importado por mujeres durante la expansión del cristianismo. Aunque no se ha determinado la causa de la muerte de la adolescente, su tumba y la cruz de oro sugieren que fue una de las primeras convertidas al cristianismo en Inglaterra.

El análisis del entierro de Trumpington Cross brinda una visión única de la vida y los rituales funerarios en Inglaterra hace más de 1,000 años. El hallazgo y la reconstrucción facial de la adolescente proporcionan pistas sobre su origen, viaje y adaptación a una nueva vida en una época de cambios importantes en Europa. Este descubrimiento y la cruz de oro ahora se exhiben en el Museo de Arqueología y Antropología de la Universidad de Cambridge como parte de una exposición llamada «Debajo de nuestros pies». El entierro de la joven arroja luz sobre una parte menos conocida de la historia antigua y muestra cómo la arqueología y la ciencia forense pueden revelar información valiosa sobre el pasado.